En la revisión ginecológica se realiza la exploración de los genitales externos e internos, de ambas mamas y regiones axilares. Además, como pruebas complementarias se realizan la citología y la ecografía ginecológica, que puede ser vaginal o abdominal.
En algunos casos, se pueden solicitar otras pruebas complementarias recomendables según la edad de la paciente, como pueden ser la mamografía o la densitometría ósea.
Además, comentaremos cualquier problema ginecológico que puedas tener para buscar la mejor solución o pautar el tratamiento más adecuado para tu caso.
Por tanto, es recomendable que acudas de forma anual a hacer la revisión ginecológica, para asegurar tu bienestar.